Las patatas dulces no son solo una alternativa dulce a las patatas normales. Pueden ayudar a regular el peso y la presión arterial Incluso el agua residual de hervir batatas podría usarse para controlar el peso y neutralizar la grasa acumulada.
Esto es según los datos de varios estudios independientes, escribe medicalnewstoday.com.
Las batatas contienen sustancias extremadamente nutritivas y saludables. Entre ellas se encuentran las vitaminas del grupo B, antioxidantes, vitamina A, vitamina C, que dan energía y estimulan la formación de nuevas células sanguíneas. Las sustancias de las batatas incluso se han relacionado con la prevención de varios tipos de cáncer
Las aguas residuales de camote son muy ricas no solo en las sustancias enumeradas, sino también en almidón, que tiene fuertes efectos en la pérdida de peso y ayuda a acelerar digestión y derretimiento de grasas Esto encuentra una investigación publicada en la revista Heliyon.
Además, un equipo de científicos japoneses de la Organización Nacional de Investigación de Alimentos Agrícolas realizó experimentos con aguas residuales de camote después de la cocción. También confirman los efectos positivos de esta agua e incluso planean desarrollar un programa para incorporarla a escala industrial.

Según ellos, su impacto contra la obesidad global sería muy efectivo. A nivel mundial, se producen anualmente más de 100 millones de toneladas métricas de batatas. El 90% de este cultivo se cultiva en países desarrollados. Es por eso que el plan funcionaría, creen los investigadores.
Los camotes son muy adecuados para hacer varios alimentos industriales como pasta, dulces, pectina, harina y almidón. Sin embargo, el resultado de esta industria es la descarga de aguas residuales de su procesamiento a los océanos y ríos. En lugar de poner en riesgo a la naturaleza por esta práctica nociva, las aguas residuales del procesamiento podrían filtrarse mediante tecnologías especiales y utilizarse para obtener alimentos y bebidas que ayuden a perder peso.
El agua de camote afecta el peso corporal, reduce la grasa corporal y potencialmente mejora el estado general de salud, según creen los investigadores.
Un experimento con ratones de laboratorio muestra que el agua de boniato reduce drásticamente el colesterol, los triglicéridos y revierte el proceso de esteatosis hepática en solo un mes. Esto tiene efectos positivos en dolencias como el síndrome metabólico, la resistencia a la insulina, la diabetes tipo 2.